Respiración de colores

Propón elegir un “color calma” para inhalar y un “color preocupación” para exhalar, invitándole a imaginar que el primero entra por la nariz y pinta el pecho de tranquilidad, y el segundo sale por la boca llevándose lo que molesta; cambia de colores según el ánimo y deja que tu hijo/a te guíe con su paleta.